Con ganas y con menos restricciones por el Covid podemos volver a la calle a celebrar el 8 de marzo, el día internacional de las Mujeres. Desde luego estos días nos sirven para poder prestar más atención a aquello que reivindican, para ayudarnos a reflexionar sobre qué opinamos, cuál es nuestra posición ante estas celebraciones y sobre todo cómo lo abordamos en nuestra labor educativa con los niños, niñas, adolescentes y sus familias. Por eso, aprovechando la ocasión nos paramos a pensar qué retos nos plantea la celebración del Día de la Mujer en la que el feminismo toma las calles y nos interpela como ciudadanía, como hombres y mujeres, como educadoras y educadores, como familia… ¿Qué retos tenemos por delante?.
¿Hemos reflexionado en los equipos sobre cómo queremos incorporar el feminismo en nuestro modelo educativo? Porque tenemos claro que ese es el camino, ¿verdad?. ¿Hemos pensado en ello?.
Las actividades que ponemos en marcha con los chicos y chicas, les acompañan en el proceso de construir su personalidad alejada de prejuicios y favoreciendo su relación de una manera más igualitaria. Compartimos la idea de que es en el feminismo en donde tenemos que educar a chicos y chicas ya que es la propuesta equitativa, igualitaria para todas las personas
¿Y en relación con las familias? Acogemos las diferencias que nos encontramos pero a la vez ofrecemos otros modelos que ayudan a padres y madres a entender la sociedad en la que sus hijos e hijas se desarrollan y van a tener que encontrar su espacio. Sociedad en la que queremos ser tratadas de manera igualitaria en donde no tengan techos por romper ni tengan que enfrentarse a un sistema binario.
Y como asociación de entidades, ¿hemos hecho esta reflexión?. Hemos incorporado el feminismo como medio para relacionarnos con el entorno, como forma de ser personas adultas, para construir un futuro juntas.
Es cierto que el primer interrogante ya nos identifica a favor del feminismo como modelo que nos ayuda a conseguir “un mundo libre de prejuicios, estereotipos y discriminación. Un mundo diverso, equitativo e inclusivo. Un mundo donde la diferencia es valorada y celebrada”.
Pues este es el camino que tenemos por delante. Os animamos a caminarlo y construirlo!!