Por fin, dos años después, hemos podido volver a realizar un encuentro de adolescentes de dos días. En el año 2020 lo teníamos todo preparado, pero al final nos tuvimos que quedar en casa. En el 2021 ya volvimos a juntarnos e hicimos un par de encuentros de una tarde. Pero es verdad que no tienen nada que ver con las salidas de dos días. En este caso hemos estado en Navamorcuende, en mitad del bosque, disfrutando del campo y del aire limpio. Hemos recargado fuerzas y hemos compartido muchos momentos inolvidables.
Los propios adolescentes de las entidades de Coordinadora, dentro del proceso de participación que llevan tiempo desarrollando, han preparado este encuentro durante los últimos cuatro meses. Lo primero que hicieron fue buscar y seleccionar el albergue al que hemos ido. Después han preparado muchas de las actividades que hemos llevado a cabo, y como no, al finalizar el fin de semana, han evaluado la actividad.
Los jóvenes han compartido dos días, en los que lo primero que hicimos fue guardar todos los móviles para poder centrarnos en lo importante: el grupo, el monte, la naturaleza… La participación por parte de los y las adolescentes ha sido espectacular. No esperábamos menos, el hecho de que hayan sido ellos y ellas los que han pensado y propuesto las actividades a realizar y el lugar donde hacerlo es garantía de éxito ¿Quién mejor que se sepa lo que quieren? También han disfrutado de tiempo libre para poder relacionarse y conocerse un poco mejor.
Es muy positivo que podamos volver a realizar actividades de manera más menos normalizada. La chavalería lo estaba necesitando después de una época muy dura. El salir, relacionarse, disfrutar de la montaña… es fundamental para la salud de todas las personas, pero mucho más para los adolescentes que están en un momento evolutivo en el que las relaciones personales son muy importantes para su crecimiento como personas.
Nos lo hemos pasado fenomenal ya estamos deseando que llegue un nuevo momento en el que reencontrarnos!!