Por fin empezamos a oler la sal de la playa, a notar el agua de las piscinas y el calorcito. Esto nos indica varias cosas, por un lado que llega el veranito, y por otro que se acaban los grupos de refuerzo educativo del Programa CaixaProinfancia; se acaban no, más bien hacemos un descanso para volver con las pilas cargadas en Septiembre y con fuerzas para el nuevo curso.
Este año ha estado marcado por los esfuerzos de los centros educativos para adaptar contenidos y ofrecerlos de manera telemática, por los esfuerzos de las familias para intentar solventar la brecha digital que aún se siguen manteniendo, por los propios niños y niñas para integrar esas herramientas y que pudieran seguir el ritmo de las clases, sin que ello afecte a su rendimiento escolar.
A pesar de las dificultades, este curso han sido atendidos/as un total de 714 menores, dentro de 16 entidades de las 17 que componen el Territorio Sureste del Programa CaixaProinfancia en uno o varios de los servicios que conforman el programa de Refuerzo educativo; con esto hablamos de servicios desde el Refuerzo individual hasta apoyo educativo más amplio en grupos reducidos de 3 a 5 o grupos de 8 a 10 menores, además de los servicios de logopedia y psicomotricidad.
Estos servicios pretenden reforzar la atención que desde la escuela se presta, desarrollar en cada participante sus competencias básicas, mejorar sus hábitos de estudio, promover su autonomía en el aprendizaje, incrementar sus expectativas e impulsar su rendimiento escolar. Todo ello a través de metodología más adaptada a los chavales, más dinámica y más participativa, ofreciendo un entorno de confianza y positivo.
Agradecemos a las entidades y a las familias el esfuerzo realizado y al Programa CaixaProinfancia el apoyo brindado en este curso tan complicado y tan lleno de cambios.