Más de 25 jóvenes han participado en un proyecto novedoso durante los últimos casi dos años.
Con el objetivo de que los jóvenes de las diferentes entidades de Coordinadora se relacionasen entre sí y trabajaran para cambiar el estereotipo que se tiene de la juventud, se reunieron en enero del año 2020 veinte jóvenes de las asociaciones Creando Huellas, El Fanal, La Kalle y la Fundación Secretariado Gitano. Esta reunión fue el germen de lo que posteriormente se convirtió en el proyecto Social Youth Challenge.
Echando la vista atrás, y con la visión conjunta del proceso y del resultado, podemos estar muy orgullosos de como se ha desarrollado. No ha sido fácil, hemos pasado un confinamiento, estamos atravesando una pandemia que dura ya dos años y las personas que han sido el motor de ese proyecto son jóvenes de entre 17 y 25 años. Probablemente unos de los colectivos que más han sufrido la pandemia tanto a nivel social, como educativo, como laboral.
Por esto estamos especialmente orgullosos de su esfuerzo y dedicación, compaginándolo con estudios, prácticas laborales, trabajos y otras obligaciones. Pero también tenemos que estar especialmente orgullosos de trabajo realizado por los educadores y las educadoras, que han estado siempre al pie de cañón tirando del carro el momento de más dificultad y poniendo en valor todo ese esfuerzo llevo a cabo por cada uno y una de esos jóvenes que han aportado su granito de arena en las diferentes fases del proyecto.
Todo comenzó con la idea de hacer algo por el barrio. A los jóvenes le hacia ilusión que el resultado de su esfuerzo fuera útil para los vecinos con los que conviven. Entre otros objetivos, querían desestigmatizar a todo un colectivo que parece que “ni estudia ni trabaja”. Esta visión es demasiado injusta para no luchar por cambiarla.
La primera fase fue de encuentros y reuniones para ir tomando decisiones. Dónde queríamos actuar, que nos gustaría que hubiera en nuestro barrio, que necesidades encontrábamos… en definitiva, ir concretando en algo palpable la idea abstracta que nos rondaba en la cabeza.
Surgieron múltiples propuestas, que se acabaron centrando en seis, tres en Puente de Vallecas y tres en Villa de Vallecas.
Para tomar la decisión de cual de las seis llevaríamos a cabo, quisimos contar con la opinión de las Juntas Municipales de Puente y Villa de Vallecas. De esta intención surgió una reunión con Borja Fanjul concejal de distrito de Puente de Vallecas y con José Miguel Blanco, asesor del Concejal. En este encuentro, los jóvenes de las entidades participantes presentaron las diferentes propuestas, conversamos con ellos y nos dieron su opinión sobre ellas y aportaron su visión de las mismas. Esta información fue muy útil a la hora de ir tomando decisiones. Por desgracia no pudimos tener la misma experiencia con la Junta Municipal de Villa de Vallecas ya que no contestaron a nuestra propuesta de encuentro.
Las ideas se iban centrando y la propuesta que tomaba más peso era la de rehabilitar una zona de descanso en el parque Forestal de Entrevías. A la hora de pedir los permisos necesarios para llevar a cabo la acción, debido a la normativa municipal, nos centramos en un banco de hormigón de 20 metros de longitud, que en su origen era blanco pero que estaba “decorado” con diferentes pintadas.
Entrabamos en la siguiente fase. Por fin ya dedicada al diseño y al arte, a pensar el que queríamos plasmar, que mensaje queríamos dar a los vecinos y a nosotros y nosotras mismas. Esta fue una de las decisiones más fáciles, queríamos resaltar la riqueza de la interculturalidad que convive en nuestros barrios, y queríamos dar luz y alegría a ese espacio, ya bonito de por sí.
Joaquín Vila nos ayudó en este proceso creativo. Fue capaz de plasmar en un diseño de un mural que cubriría todo el banco esas ideas que teníamos.
Conseguidos los permisos necesarios, los días 10 y 11 de diciembre fueron los dedicados al trabajo directo sobre el banco. Preparación del hormigón para pintarlo, darle dos capas de color a todo el banco, pintar los detalles y el sky line. Dos jornadas intensas en las que más de 20 jóvenes participaron en conseguir el espectacular resultado final.
Como guinda al proyecto, el día 22 de diciembre tuvimos un evento de inauguración donde pudimos celebrar el resultado del todo el trabajo. No fue el evento soñado ya que tuvimos que tomar las medidas preventivas necesarias por el inicio de la sexta ola de la Covid, pero por lo menos pudimos hacer un pequeño homenaje al esfuerzo puesto por parte de las entidades participantes. Al evento acudieron, además de representantes de las entidades, el Director General de Juventud, Nikolay Jordanov, el Comisionado de Cañada Real de la Comunidad de Madrid, Markel Gorbea y el asesor del concejal del distrito de Puente de Vallecas, José Miguel Blanco. El final del evento fue dinamizado por la Escuela de Samba Rakatui de la Asociación La Kalle.
Estamos muy orgullosos del resultado de este proyecto y estamos deseando comenzar con los siguientes para seguir dando voz a la juventud de nuestros distritos, que siguen teniedo mucho que decir y que aportar.
Seguiremos trabajando y luchando por una sociedad más justa donde las personas se conviertan en protagonistas de sus procesos y generen cambios sociales que mejoren la convivencia y la vida de los vecinos y vecinas.